sábado, 20 de octubre de 2012

Hermano Árbol

Supongo que fue el destino, nacimos el mismo día. Dos seres vivos brotando en un mismo instante.

Crecí acariciando tus hojas... sujetándome a tu vida, gateando a tu alrededor, llamando tu atención.
Tus hojas me cantaban nanas, un balanceo suave  en la madrugada.
Apartabas tus ramas cuando quise ver las estrellas desde mi ventana, y en calma me ayudabas a imaginar mis deseos. En noches cubiertas tus hojas simulan luceros.
Tu sombra acompañaba mis días, tú en el jardín...inmóvil...pero siempre mi compañero.
(...)

Fragmento del cuento "Hermano Árbol".
Autor: Braulio Meléndez Pérez 

Los Ángeles también se caen

Fue un ruido instantáneo, un suave estruendo.

En la azotea de casa los gatos casi no levantan el sueño; ni tan siquiera las plantas soltaron su fragancia, la contuvieron.
Tumbado sobre la superficie, acariciando el suelo, sus alas cobijaban su cuerpo.
Un pájaro dulce, luminiscente, diferente; para mi un extranjero.
Lo recojí entre mis brazos y me dió consuelo.
En su rostro vi  bosques, mares, el espacio, el firmamento.
Plumas de espuma blanca, finas láminas de terciopelo. Su mirada me cantó callada;
su sonrisa reflejó un anhelo.
(....)

Fragmento del cuento "Los Ángeles también se caen".
Autor: Braulio Meléndez Pérez 

El Efecto Caracol

(Días previos a la fecha de la lluvia de estrellas.) 
Aquella tarde todos los caminos se unieron en uno. Todo pareció coincidir en un sólo punto: una espiral de caravanas. Pertenencias rodantes, casas sin calles, vecinos de un solo instante. Todos coincidieron en aquel mágico punto. Maletas gigantes que guardan pequeños tesoros. Vidas que se giran hacia donde sale el sol.
 (....)
Todos abren sus casas, conchas blancas, baúles con duende como el que abre su corazón, y alrededor, una hoguera que da calor a conversaciones de una vida, una experiencia, un poco de estos días, de tus ratos, en tarros de cristal fino sin etiquetar.
(....)

Fragmentos del cuento "El Efecto Caracol".

Autor: Braulio Meléndez Pérez.


miércoles, 17 de octubre de 2012

Yo, el niño que vive en mí

Cerré los ojos y ahí estaba Yo, el niño que fuí hace tiempo, está asomado a un balcón que da a un lugar que es mi alma, un patio hacia el interior.
A veces le vence el sueño, se queda adormecido, olvidado en el tiempo.Pero hoy ha madrugado para despertar suavemente mis sentimientos perdidos.
(...)
Me gusta cuando me duermo con el tic-tac de tus latidos. Respirando suavemente mientras me quedo dormido.
Él me dice: “abre tus ojos y deja que me asome a tu vida, la mía.
(...)

Fragmentos del Cuento "Yo, el niño que vive en mí"
Autor: Alex Meléndez Pérez